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jueves, 17 de julio de 2014

CONDUCTA DEL SUMISO

En General

El siervo hablará a su Amo de Usted y le llamará: Amo, Señor o Dueño, o del modo que le sea ordenado.

Para recordarle que ante él es inferior, el Amo lo llamará; sumiso, siervo, perro, esclavo, abyecto, puto, mierda, escoria o cualquier otra denominación que decida.

Ante su Amo,  el sumiso siempre se comportará respetuoso y atento a sus órdenes.

El sometido guardará permanente silencio. Solo podrá hablar si se le concede permiso.

En el chat:

Iniciará con una frase de saludo, y poniéndose a las órdenes de su Señor por si él desea entablar conversación.


Invariablemente pedirá permiso para hacer alguna pregunta, plantear algún asunto o retirarse de la conversación. Cualquier petición puede ser aprobada o denegada por su Señor y el sumiso acatará su voluntad.

En público:

No podrá mirar a su señor a la cara, mantendrá siempre la vista hacia el suelo.

Se mantendrá callado y solo responderás lo que él le pregunte
Nunca caminará a su lado, ni delante de él, siempre se mantendrá un paso atrás.

En privado:

A menos que reciba otra instrucción o permiso, ante él invariablemente permanecerá desnudo, de pié, inmóvil, en silencio y con la vista al suelo.

En cualquier caso, un buen siervo debe esforzarse para expresar verbal o físicamente la adoración que siente por su Amo, enalteciéndolo permanentemente; y para marcar las diferencias, al mismo tiempo se auto denigrará constantemente. Esta es una característica que distingue a los siervos excelentes de los simples buscadores de vergas